En el año 1996, en una audiencia papal, el papa Juan Pablo II dijo: “Las ventajas de la lactancia materna para el lactante y la madre incluyen dos beneficios principales: nutrición adecuada y protección contra enfermedades. Esta forma natural de alimentación puede crear un vínculo de amor y seguridad entre madre e hijo, permitiendo al mismo tiempo que el niño afirme su presencia como persona a través de la interacción con la madre.”
Traigo a colación estas palabras que formaron parte de su discurso porque son muy vigentes hoy en día y con ellas podemos ir desplegando algunos de los innumerables beneficios de la lactancia materna, que se expanden y transforman no solo a la madre y el niño, sino también al medio ambiente y a la sociedad en general.
A continuación te compartiremos 3 beneficios de la lactancia materna a través de la leche humana seguramente no conocías:
1. Protección anti-caries: Pues, ¡si! Es muy importante saber que la leche humana contiene cantidades significativas de flúor, es por eso que la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés) ya no recomienda suplementar con flúor de forma rutinaria a los lactantes amamantados, El desarrollo significativo de dientes temporales y permanentes que ocurre después del nacimiento depende de las reservas fetales de flúor y del flúor disponible en la dieta. Los estudios que comparan bebés amamantados y alimentados con fórmula muestran una clara diferencia, con menos caries dental y una mejor salud dental en los bebés amamantados.
2. Barrera bacteriostática natural: Se ha evidenciado científicamente que la leche humana contiene gran cantidad de proteínas (aproximadamente 400) que cumplen roles curativos, preventivos contra virus y enfermedades. Como es el caso de la lactoferrina, esta proteína del suero (al dejar la leche en reposo podemos ver una capa gruesa de leche coagulada, ese coágulo se contrae y deja escapar un líquido transparente, este se denomina suero, el mismo contiene: agua, electrolitos y proteínas) atrae y se fija al hierro protegiendo al lactante de infecciones intestinales y que impide el crecimiento de bacterias dependientes del hierro. Como dato curioso es relevante saber que apenas hay (casi no hay) lactoferrina en la leche de vaca y que la acción de la lactoferrina natural que se adquiere a través de la leche humana como factor de protección anteriormente mencionado se ve saturada (es decir puede llegar a perder su factor protector bacteriostático) cuando se le administra de forma exógena hierro al lactante.
3. Nutrición y protección (la leche humana es todo en una): La leche humana tiene una función dual, ya que protege y nutre a la vez. Es funcional porque no solo aporta nutrientes, sino que también tiene diversos beneficios sobre varias funciones fisiológicas del organismo que van mucho más allá de su valor nutricional, lo que trae como consecuencia efectos positivos para la salud, el bienestar y la reducción del riesgo de padecer enfermedades. En este apartado me encantaría mencionar a la increíble lisozima, el lisozima es una enzima poderosa capaz de destruir una gran diversidad de bacterias, el lisozima aumenta en la leche materna proporcionalmente al crecimiento del amamantado actuando como un antibiótico natural, otro dato curioso es que la concentración de lisozima en leche materna es tres mil veces (3,000.00) superior a la de la leche de vaca y, además, es cien (100.00) veces más activas, ¿increíble, cierto?
Siempre que tengas dificultades o preguntas concernientes a la lactancia materna, no dudes en asesorarte por especialistas en lactancia y como siempre digo: ¡No comas cuento, come conocimiento!
Escrito por: Rosangel Medina, Educadora y Asesora en lactancia materna
correo: lactanciasocial@gmail.com