Ya en esta semana tu bebé tiene un tamaño de más o menos 4 a 6 cm de largo, eso lo podemos comparar con el tamaño de un langostino.
Durante este periodo se pueden hacer una serie de exámenes que nos ayuda a saber si el bebé presenta alguna alteración cromosómica:
Se combinan un estudio que se llama tamizaje bioquímico materno del primer trimestre, que es un examen de sangre que se le toman a mamá y puede diagnosticar enfermedades como síndrome de Down, trisomía 13, trisomía 18.
También existe la posibilidad de hacer un estudio en sangre materna que puede detectar la presencia de otras alteraciones cromosómicas además de estas tres que se llama ADN fetal; este estudio es importante en mujeres con edad materna avanzada por encima de los 35 años, con antecedentes de embarazos anteriores como malformaciones fetales o enfermedades del feto, con esta prueba existe la ventaja de poder saber el sexo fetal a esta edad tan temprana.
Otra ayuda diagnóstica que tenemos para verificar que el feto esté libre de alguna condición es la ecografía o ultrasonido de tamizaje del primer trimestre:
Este estudio puede identificar malformaciones tempranas a nivel de corazón, cerebro y abdomen del bebé y verifica que estén sus cuatro extremidades completas y además nos deja ver si existen marcadores por ultrasonido que pueden indicar si hay alguna alteración cromosómica del feto.
Cambios físicos que va a presentar tu bebé en esta semana:
- La apariencia cada vez más parecida a un humano
- Aparece la barbilla y el cuello se va alargando un poco
- Formación de los genitales (ya se pueden distinguir el sexo del feto adentro del útero) por ultrasonido muchas veces no es certero pero se puede hacer un pronóstico del sexo fetal dependiendo de un ángulo de inclinación de la cadera.
El útero empieza crecer y más o menos se encuentra su tamaño a nivel de la sínfisis púbica (el huesito debajo del monte de Venus )
Para la mamá es un periodo de estabilidad y alivio , donde la mayoría de los síntomas molestos están menos pronunciados o no están.
Te recomiendo que mantengas una actividad física regular, al menos hacer una caminata de 30 minutos al día ; si eres atleta antes del embarazo o realizas algún tipo de ejercicio, puedes continuarlo siempre y cuando no sea un ejercicio de alto impacto.
Recuerda que el embarazo no es una enfermedad y no tienes contraindicaciones de poder realizar actividad física ni debes suspender tu vida cotidiana durante el embarazo.